Una vez mas como decía la canción "vuelvo a Granada" y como no puede ser de otro modo, toca hacer el típico entreno. Esta vez buscando he encontrado una ruta que pasa por La Alhambra y sigue un poco mas arriba. Se trata de un conjunto de pequeñas torres que fueron construidas en el siglo XIV para vigilar el Generalife, llamado la Silla del Moro o el Castillo de Santa Elena.
Castillo seria pero pequeño y según cuenta una leyenda es el sitio al que se retiro el rey Boabdil y se refugio para contemplar perplejo el fin de su reinado.
A lo que vamos que me lio. Empiezo temprano, a eso de las 7 de la mañana, la noche ha sido calurosa y apetece salir a correr temprano.
Caliento desde casa y empiezo en Plaza Nueva subiendo por la cuesta Gomerez, que a pesar del calentamiento me hace poner pie a tierra.
Una vez retomado el resuello la típica foto en la puerta no puede faltar, y como es muy temprano hay poca gente y ademas no te quieren hacer la foto (cosas del coronavirus) asi que toca recurrir al selfie.
Preguntando a un par de andarines que me cruzo llego un poco mas tarde a la buscada silla y como en la fuente del sapo, allí ni había silla ni moro alguno, estaba cerrado aun, otro dia volveré para verlo de cerca.
Ya llevo casi 5k y decido dar la vuelta, nuevo paso por La Alhambra y la bajada la hago por la cuesta del Rey Chico, empedrado andaluz y cuesta abajo que se me clava hasta el alma, pero palos agusto no duelen.
Ya atravesando el Paseo de los tristes, bonita calle, y mas a estas horas que apenas hay gente, no me puedo reprimir las ganas de una vez mas fotografiarla; por mas fotos que le hagas siempre tiene una cara diferente.
Y bueno, al final me hago mi ratico barefoot como siempre y al final de la mañana me ha salido un "buen entreno". Ahora una duchica refrescante y un desayuno reconfortante y a seguir el dia que aun nos queda mucho por ver.
Un saludico y talueguico.